Fuente: NOTIMEX
MÉXICO.- El problema del desarrollo del jazz en México ha dejado de ser la falta de público, pues ya existe un cúmulo de fieles melómanos que consumen los productos que los jazzistas están creando, consideró hoy aquí el guitarrista Emmanuel Mora, miembro fundador del grupo Xamán. Las carencias que enfrenta en la actualidad este género musical, dijo el músico en entrevista con Notimex, tienen que ver ahora con las instituciones encargadas de apoyar la creación musical que están dando más importancia a estilos más populares. "Si tenemos alguna carencia es este movimiento nacional de estructuras, el camino institucional que ha apoyado la música está un poco en entredicho, lo que nos falta son esas conexiones para particpar en más festivales, más proyectos", dijo. Mora quien junto a sus hermanos Alejandro (bajo) y Rodrigo (teclados) y el baterista Tirso Buenfil crearon desde 1988 al grupo Xamán, señaló además que el problema del jazz "ya no es el público, pues tenemos público que compra nuestros discos y acude a nuestros conciertos". Agregó que ese grupo de fieles "está pendiente de las estaciones de radio que pasan jazz nacional y van a las presentaciones, están en contacto con nosotros", por lo que estimó la necesidad de apoyar de manera más directa al género, para no perder al público que ya se ha creado. Separada por un período de cinco años, la agrupación jazzista, que se distingue por el uso de un estilo que fusiona géneros, como el afrocaribeño, el rock u otras formas más populares, presentará el próximo 7 de octubre en la Plaza de las Artes, del Centro Nacional de las Artes (Cenart), su tercer disco titulado Xamán-EK (Estrella del Norte). Xamán, explicó Mora, "es básicamente un grupo de fusión que mezcla el jazz con el rock y la música popular latinoamericana en general", con la intención de recuperar la identidad musical del mexicano y proponer un espectro nuevo de creación sonora, fincado en el jazz. El grupo, agregó, "se nutre de la música folclórica de todo el mundo, en especial de la mexicana y de toda la música que suena en la radio por ejemplo, la cumbia, la afrocaribeña, la tradicional peruana o la mal llamada salsa, de donde tomamos la estructura y componemos y utilizamos los ritmos para extenderlos o disminuirlos". El resultado, opinó, "no suena a música folclórica" y ha sido catalogada como un estilo folk progresivo, en el que se distinguen tonalidades rítmicas del son huasteco, el cha cha cha, el reggae, el calipso o el huapango. Actualmente, consideró Mora, "creo que la fusión es una de las tendencias del jazz actual, podemos ver grupos árabes, hindúes, japoneses o latinoamericanos que en vez de copiar los esquemas que llegan principalmente de Europa, están tratando de hacer una recuperación de sus raíces". Además, la fusión, para el grupo, cuyos integrantes radican en la ciudad sureña de Campeche, "nos conecta racial, étnicamente y conecta nuestras idiosincrasias". "Siendo músico dedicado al jazz -expresó el guitarrista- encuentro una gran libertad en el aspecto de la improvisación, siempre he buscado que el grupo no se limite a tocar el jazz tradicional o las fusiones conocidas como el funk o el jazz latino, sino tratar de experimentar y profundizar más en nuestras raíces". Xamán nació hace 19 años en Playa del Carmen, Campeche, donde los lugareños los bautizaron con ese nombre de origen maya y cuya producción discográfica incluye también los discos Majazz y Hunracán. Su última producción Xamán-EK, que será distribuido por el sello Xquenda de la cantante Susana Harp, contó con la participación de músicos como César Regino, en los instrumentos precolombinos, Pablo Hidalgo Wong, flauta, el bajista Marco Rentería y el baterista Rodrigo Barbosa. El disco, que incluye siete temas compuestos por Emmanuel y Alejandro Mora, será presentado antes de sonar en el Cenart, en el club de jazz Papa Beto, en esta ciudad, el 5 de octubre próximo.
